Empezamos la visita en el Monasterio de Veruela, aquí están las chicas, incluida la abuela en el claustro; un guía nos enseño las distintas dependencias de la planta baja, después de haber venido varias veces aún no he podido ver la segunda planta, donde están las celdas.
Después seguimos hasta el pueblo de Añón de Moncayo, donde se celebraba una feria medieval, desde este bello rincón se división las famosas "Peñas de Herrera", que son estribaciones del Moncayo.
La comida la realizamos en el centro de interpretación de Agramonte, que luego visitamos.
Por la tarde visitamos Tarazona: la Plaza de Toros Vieja, el Ayuntamiento, la judería...
Y la catedral, que tras 30 años en restauración se puede visitar, aunque siguen las obras, por fuera se pueden ver los distintos elementos, torre, cimborrio, portada, claustro, naves.... pero dentro es el cimborrio es el que más me llama la atención, de la planta rectangular de nave se pasa al octógono por medio de trompas, y sobre esta estructura se abren los ventanales y hornacinas con estatuas... Es esta una obra de arte porque se engloban los tres aspectos de forma unitaria: un plano visual, el condicionante técnico y el plano mental, del espíritu...