jueves, 30 de abril de 2020

Tenemos en casa a Isa, la sanitaria optima


Isabel nos da la tranquilidad, porque si nos ataque el Covid-19,  ella nos sanara.


Casi cincuenta días lleva Isa en la "batalla", cuidando a personas que están luchando por su vida, poniendo su corazón en el trabajo y deseando que pronto termine la pandemia... Todos los días sale de casa con renovada ilusión, a trabajar al Hospital Lozano Blesa "El Clínico". Allí pasa la jornada agotadora, desarrollando todo su saber por curar a "sus enfermos".


¡En casa Isabel esta aislada!. No nos podemos fiar, el virus asesino tarda varios días en descubrirse, así es que ha ocupado la habitación de la abuela Victoria, que ahora está en casa de Laura, la echamos de menos. En la habitación de la abuela come, duerme y hace gimnasia... hasta se pone su bata. Para nosotros resulta dura esta situación, pero sabemos es por el bien de todos.


Quizá sea Viky la que más sufre esta situación, es quien más rato pasaba con ella, además de hermana es amiga... el otro día cocino pizza casera para cenar, de las que hacia en Cracovia... y se la dedico a Isa, le puso su nombre con aceitunas negras. Aunque parezca que esta cerca, Isa está en el pasillo.


Hoy estamos contentos, le han dado el resultado del frotis que ayer le realizaron y ha salido NEGATIVO... Super contenta estaba con su compañera Lidia, también negativa.

Mañana 1 de mayo nos pondremos un poco tristes, no podremos ir a Robres, nuestro pueblo a comer al campo con la cuadrilla. Haremos una quedada virtual, pero no será lo mismo; como ha escrito un amigo éste año nos han robado el primero de mayo.

Isabel nos cuenta que en el Hospital esta bajando la presión, la curva de contagios es descendente y hasta el gobierno anuncia medidas de desconfinamiento. Se ve la luz al final del túnel.

jueves, 23 de abril de 2020

40 días de cuarentena

Hoy es 23 de abril, el día del libro y hoy se cumplen cuarenta días sin salir de casa.


Hoy no podemos salir al Paseo de la Independencia a comprar libros, a escuchar música, a saludar a mis amigos libreros, propietarios de pequeñas librerías que aprovechaban San Jorge para hacer buenas ventas de libros. Espero puedan superar la crisis económica que están sufriendo.
Esta semana he empezado a leer el libro "Juego de manos" de Juan Goytisolo, una edición de 1977 de la colección destino libro, como no puedo salir a comprar nuevos estoy revisando mis viejos libros.


¡En los hospitales la lucha continua! Isa trabajando con su traje anti contagio, para ayudar a recuperarse a los enfermos. Isabel nos cuenta que el número de enfermos en el hospital está bajando, la tendencia ha cambiado, el número de muertes diario se ha reducido a la mitad y los dos hospitales de Campaña que se habían preparado en Zaragoza, uno en la Feria de Muestras y otro en la Sala Multiusos del Auditorio no han hecho falta emplearlos.



Además de leer y ver películas, termino de ver el cartero y Pablo Neruda, en casa hemos adaptado el salón a las nuevas circunstancias, ahora es también gimnasio... Con Viky empezamos hacer gimnasia a las nueve de la mañana, seguimos el programa "Muévete en Casa" en la 2 de televisión española. A las doce, con Carmen practicamos chicum, nos viene bien para relajarnos y estirar los músculos. Por la tarde seguimos gimnasia de Patry Jordan... 


También hoy 23 de abril celebramos el día de Aragón,y a este dragón lo vamos a ganar. Hoy echamos de menos salir de casa para ver a mi hermana Asún, a la abuela Victoria, al resto de la familia y a los amigos... Este lunes ya saldrán los chicos, espero que pronto nos toque a los mayores.

Mi cuarto esta lleno de libros,
son todos mis conocidos.
Algunos de ellos son unos sabios.
Algunos huelen al enebro de mi tierra.
Y algunos me traen el hedor del océano muerto.
¡Oh como soporta el papel todo esto!
Algunos son unos trabajadores.
Bregando duro.
Vierten las lágrimas a sus lectores.
Algunos no saben nada y no entienden
Que el sol tiene conciencia.
Algunos están llenos de cuentos sombríos,
algunos son predicadores y charlatanes,
algunos son unos restos mortales,
algunos son raudales implacables y ríos.
Y otros son sus puentes que pueden llevarte a la orilla.
¡Hay tantos libros en ésta habitación mía!
Alguno son como un trago de vino.
Algunos son de leche del camello.
Se derriten en la mano del invitado.
Pero con un consejo pueden enderezar tu camino.
No puedo medir, ni imaginar su fuerza.
Tal vez cien mil caballos están allí escondidos. 
Vertiendo al mundo su amor y su odio.
Su alegría y su duelo...
Pero cuando sueño, a menudo solo un libro veo,
Que se está escribiendo por lo ángeles en el cielo.

TYNYSHTYKBEK  ABDIKAKIMULY








miércoles, 15 de abril de 2020

La Pandemía no se termina


Llevamos más de un mes aislados. 130.000 muertos en el mundo, 18.300 en España y 500 en Aragón, y la Pandemía no se termina.


Amelía Arias, cumplió el pasado 3 de marzo 98 años y la semana pasada se nos fue para siempre. A "Meli" como la lamamos la conocí a través de su hija Pilar, compañera de trabajo durante veinte años. Pero fue hace tres años cuando más relación tuve con ella, fui a visitarla varias veces a la Residencia en la que se encontraba. En esas visitas me contó su vida: "Nací en Miranda de Ebro, tuve una dura infancia de posguerra, más tarde me casé y nos fuimos con mi marido a la Argentina, al poco tiempo volvimos a España y a mi marido le salió trabajo en Zaragoza, así es que nos vinimos a vivir aquí, después nació mi Mari Pili, así es como llamo a mi hija, pasado el tiempo murió el marido y tuvimos que salir adelante y luego... " La eterna sonrisa, nunca tuvo una mala palabra contra nadie, y además nuestra relación se fue reforzada cuando mi hermana Asún, que trabajó en servicios a domicilio, estuvo una temporada yendo  su casa Melí estuvo en nuestra boda y ahora nos la ha quitado el maldito  COVID-19. ¡Hasta siempre Meli, nunca te olvidaremos!.


Y mientras la vida sigue, cada día nuevas muertes van aumentando la fatídica cifra, algunas de estas personas pasan por el hospital donde está Isabel trabajando, sigue en el Clínico, haciendo sustituciones de compañeras infectadas, porque también mueren sanitarios infectados.
 En casa esta aislada, cuando vuelve del trabajo se encierra en su habitación, donde hace la vida: comer, dormir, gimnasia, ordenador, además la ropa se lava aparte y tiene un baño para ella sola. Como dice una amiga es ¡nuestro ángel de la guarda!


A las ocho de la tarde, como en el resto del país, salimos al balcón a aplaudir, con éste simple hecho reconocemos la labor de los sanitarios: médicos, enferm@s, auxiliares, celadores y personal de limpieza que trabajan en hospitales y centros de salud... Además nos comunicamos con los vecinos de la casa de enfrente, a los que no conocemos, pero con los que nos une el mismo sentimiento... Tras  los aplausos vienen las  interpretaciones musicales de los vecinos del primero, ahora ya son dos las melodías que interpretan, la primera seria y la segunda charanguera, ayer interpretaron el himno del Zaragoza, algún vecino hasta saco una bufanda futbolera.


  Mientras tanto yo aquí estoy confinado en casa, leyendo, ahora estoy con libro "Bandoleros aragoneses" de José Antonio Adel y Celedonia Garcia, ex compañero del Instituto de Fuentes. También hago gimnasia, hay que cambiar grasa por musculo y veo pelis, algunas las había visto por primera vez cuando tenía diez años: Espartaco, Tarzán, los Miserables. Además con Carmen vemos la serie los Soprano... Todo esto no me quita la preocupación y cierto miedo, cuando trabajando Isabel, a veces sin querer se me van los pensamientos al hospital.

lunes, 6 de abril de 2020

24 días de enclaustramiento


24 días llevamos ya enclaustrados en casa y ¿hasta cuando?


Enclaustramiento viene de claustro, y en casa nuestro claustro es el pasillo, aquí dan todos los espacios de la casa: puerta de entrada, patio, dormitorios, cocina, baños... en el pasillo damos pequeños paseos, tenemos que estirar las piernas porque nos cansamos de estar sentados en el sofá viendo televisión o leyendo.


En 24 días hemos salido de la rutina, hemos aprendido que un virus, un ser microscópico nos puede matar a todos, que estando encerrados también hay formas de relacionarse con la familia y amigos y tenemos más tiempo para leer, ahora estoy con "una belleza rusa" de Vladimir Nabokov.. En la televisión, con Carmen hemos terminado de visionar la serie de "la catedral del Mar", está en la plataforma Netflix.


Carmen es nuestra cocinera favorita, tiene tiempo para todo: gimnasia a las nueve en la dos, más tarde practicamos chicum y aún le da tiempo para realizar ejercicios gimnásticos. ¡Le falta tiempo para llegar a todo! Yo en cambio tengo hasta tiempo para aburrirme, que después de dos años de jubilado no esta mal, tener un poco de aburrimiento para dejar volar el pensamiento estando tirado en el sofá.


Isa, la primera agachada de la izquierda es nuestro contacto con el mundo real, ella nos pone cara a las cifras que nos dan en la televisión, esta semana han fallecido por Covid-19 la abuela de una compañera, que vive en Jaén, no ha podido asistir al entierro y también la madre de otra compañera del Hospital Clínico, una pena, mientras la hija esta salvando vidas su madre ha muerto sin poderla salvar. Con todo esto el estrés que están soportando estos días los sanitarios es brutal.


Si te dijera, amor mío

Que temo a a la madrugada

No sé qué estrellas son estas

Que hieren como amenazas

Ni sé qué sangra la luna
Al filo de su guadaña
Presiento que tras la noche
Vendrá la noche más larga
Quiero que no me abandones
Amor mío, al alba

Los hijos que no tuvimos
Se esconden en las cloacas
Comen las últimas flores
Parece que adivinaran
Que el día que se avecina
Viene con hambre atrasada
Presiento que tras la noche


Miles de buitres callados
Van extendiendo sus alas
No te destroza, amor mío
Esta silenciosa danza
Maldito baile de muertos
Pólvora de la mañana
Presiento que tras la noche

LUIS EDUARDO AUTE