Tras las huellas del Greco en Toledo
En nuestra instancia en Toledo una de las intenciones fue rastrear y admirar las obras del Greco.En la sacristia de la catedral, convertida en una de las mejores pinacotecas de España, encontramos obras de Tiziano, Velazquez, Rafael, Van Dyck nos encontramos con el expolio, la pintura primera pintura realizada por el Greco en España, era julio de 1577 y se sabe que no gusto ya que entabló un pleito contra el arzobispo porque no le quería pagar lo pactado... el tema es cuando Jesús es despojado de sus vestiduras, Cristo es la figura central, con la túnica de color rojo. Fray José Sigüenza escribió con respecto a ésta obra: “los santos se han de pintar de manera que no quiten la gana de rezas en ellos".
La siguiente obra "el martirio de San Mauricio" realizado para Felipe II resultó otro fracaso, no "estuvo a la altura" de las especificativas de la corte.El Greco nadando contra corriente se definitivamente se afincó en Toledo.
En la calle Santo Tomé, Tomas para los amigos, se encuentra la iglesia dedicada al santo en la que admiramos varias obras del maestro, y en una sala adjunta el entierro del Conde Orgaz, con la que el Greco llega a la cumbre de su pintura, la obra narra el milagro acontecido cuando don Gonzalo, conde de Orgaz murió en 1323, en recompensa a su caridad bajaron del cielo San Esteban y San Agustin para enterrarlo. El cuerpo escorzado del conde y el niño mirando hacia nosotros nos señala el milagro, desde la vida terrenal, la mirada es conducida siguiendo el lenguaje de las manos y las miradas de los personajes hasta hacernos volar a la Gloria Celestial.
La obra es un alegato contrarreformista pues no solo se exalta la virtud de la caridad como medio de salvación, sino también el culto a los santos, intercesores ante Dios por los hombres.
Domenikos Theokopuolos también trabajo como arquitecto y escultor, su obra principal fue en el Hospital de San Juan Bautista de Tavera, en las afueras de la ciudad, encargada por su amigo Pedro Salazar de Mendoza, administrador del Hospital. En la iglesia me impresionó el sepulcro del Cardenal realizado por Berruguete, a un lado se encuentra la obra el bautismo de Jesús, se aprecia la estilización de las figuras, en el Manierismo se alarga el canon, rechazando las proporciones del Renacimiento, "la armonía del cuerpo humano se encuentra en la anatomía del cuerpo en comvimiento". La paloma del Espíritu Santo crea un eje vertical para unir la zona de la Gloria con la tierra, donde tiene lugar el bautismo, aparecen dos zonas: la terrenal y la celestial.
El domingo fuimos a Madrid, con la entrada al museo del Prado me entregan el plano en cuya portada se encuentra "El caballero de la mano en el pecho", Las salas 8B, 9B y 10B están dedicadas sl pintor cretense: la Trinidad, San Sebastián, la Crufixión, la Resurrección, el Pentecostes, varios apóstoles e incluso una escultura completan las obras del artista... En el cuadro la actitud del retratado con la mano en el pecho se interpreta como la de juramento, el rostro y la mano son enmarcados por las manchas blancas que crean la gola y el puño de encaje destacados contra el fondo oscuro del cuadro y el negro del traje.
Creta le dio la vida y los pinceles.
Toledo, mejor patria donde empieza
A lograr con la muerte
eternidades
Divino Griego, de tu obrar no admira
que en la imagen exceda al ser el arte,
sino que de ella el cielo por templarte
la vida deuda a tu pincel retira
No el sol sus rayos por su esfera gira
como en tus lienzos Basta el empeñarte
en amagos de Dios:
entre a la parte
Naturaleza que vencer
se mira.
Émulo de Prometeo en un retrato
no afectes lumbre, el
hurto vital deja,
que hasta mi alma a
tanto ser ayuda.
Y contra veinte y
nueve años de trato,
entre tu mano y la de Dios, perpleja,
cuál es el cuerpo en que ha de vivir duda.
Fray Hortensio Félix
Paravicino