Vuelta a Robres por trabajo
Después de mes y medio he estado en Robres, a pesar de estar confinado he podido pasar de provincia por motivos laborales: vender las almendras.
A las nueve en punto estábamos en la bascula del silo, y el camión de recogida este año fue puntual. Mientras a David le sacaban el rendimiento yo estaba de charleta con Antonio y Fernando, como marcan los nuevos tiempos a distancia prudencial y con mascarilla... este año la cosecha ha sido floja: 600 kgs de almendra largueta, 30 de común y solo 15 de marcona, record negativo. Además dicen que los precios van bajos. En fin que espero vengan tiempos mejores.
Además de vender las almendras hemos cogido los membrillos de casa, buena cosecha, ya he hecho carne membrillo... Carmen apara el saco para que se lo llene de la amarilla fruta que a mi me encanta. A Robres fuimos la noche anterior porque tenia las almendras extendidas en el cubierto aún sin recoger y tuvimos que madrugar para estar a las nueve.
En la Agricoop de Robres he sido nombrado secretario, hemos tenido una reunión por zoom, es lo que ahora se lleva. Se han renovado tres cargos de la junta de gobierno y a mi me ha tocado entrar, ahora la componemos: Pedro de presidente, Jesús es vicepresidente, Pedro Antonio de tesorero, yo de secretario, Miguel de interventor y de vocales: Elias, Juan Manuel, Anchel. Creo que vamos a formar un buen equipo. Básicamente nuestro trabajo gira en torno a la Concentración Parcelaria que se esta realizando en Robres, esperamos que se termine pronto.
Estos días se semi confinamiento me dedico a cortar las almendras pelonas, han quedado un par de sacos que la máquina ha limpiado y como van muy baratas de precio las limpio a ratos en casa. Se acerca la navidad y hay que hacer turrón, para no ensuciar la casa me pongo en la cocina, vestido con mu baja blanca, aún la conservo desde que trabajaba en Nanta y con la cortadora voy sacando la pepita de la almendra y si alguna se pone difícil empleo el cuchillo.
Pensar en dejarlo, mi
idea recurrente
EL toc perderme
Ser un Bartleby sin
banco
Olvidar el folio en
blanco
Fantasear con la idea
de no escribir más
Y dejar de ser una
sombra de la realidad
Si lo analizo fríamente
Creo en total hablo
más solo que con gente
Perdiéndome la vida
pa contársela al de enfrente
En mi cárcel son sus
tres comidas
Sin ser un matador ni
un Mario Kempes
Y me imagino
abandonándolo, inservible
Buscarme un curro
físico que sea cierto y tangible
Salir de mi burbuja
de liricas enfermas
Currar a lo Lester
Burhham
Y en mi descanso,
pesas y fumar hierba
Y está claro que si
se con certeza
Que la peor de to´s
mis compañías siempre ha si´o mi cabeza
La hija puta me da
letras que me han pagao un palacio
Y sin embargo siento
que dentro el tiempo mata despacio