De Burdeos y Niort

Del 22 al 30 de junio hemos estado, con Pilar y Emilio en el oeste de Francia.

Burdeos es la primera ciudad que hemos visitado, llegamos a la hora de comer, así es que lo primero fue comer, junto al rio Garona, después la visita a la Plaza Victoria, para nosotros la plaza de la tortuga, porque al igual que la última vez que estuvimos con  las chicas, hace diez años, nuestro apartamento estaba cerca de ésta plaza y en nuestras salidas siempre pasábamos a darle "los buenos días a la tortuga".

Al día siguiente, partiendo de la torre de San Eloy recorrimos la ciudad, subimos a la torre de la catedral de San Andrés, visitamos el palacio de la Comedia, la esplanada de Quinconces, donde admiramos la fuente monumento a los girondinos, después paseamos por la rivera de Garona, pisamos descalzos el espejo del agua, más adelante nos encontramos la plaza de la Bolsa, varias puertas monumentales de entrada a la ciudad como la de Calihau para terminar en la basílica de san Michel, cerca de la plaza de los capuchinos, en la que comimos. Después ya con el coche nos acercamos a ciudad del vino, un edificio con forma de calcetín y tras degustar varios vinos de la región nos dirigimos a Niort.

En Niort nos esperaban nuestros amigos Marisa y Francisco, que tras pasar por Bruselas de funcionarios de la CEE se han establecido en esta bonita ciudad francesa. Tres noches hemos pernoctado en casa de Paco, desde aquí hemos visitado, la turística isla de Re, donde subimos al faro de las ballenas, también estuvimos en la bonita localidad de La Rochelle. En Niort entramos en el espectacular castillo blanco construido por el rey Enrique II, después nos llegamos hasta el ayuntamiento y la consejería y pata finalizar la jornada hemos cenado en un restaurante céntrico en el que hemos visto el partido del mundial entre Marruecos y España.

El domingo comimos paella cocinada por el chef Emilio, además de Marisa y Paco la han degustado su hija Raquel y Jerome, que han aportado una tarta casera, también estaban los nietos: Anais y Esteban, con quien he jugado unas partidas de futbolín. En la noche, tras la cena, hemos bebido varios gin tonic, y después hemos echado un bailecito, ha sido una noche emotiva...