Una noche en el CaixaForum de Zaragoza
Con motivo de la celebración del día mundial de los Museos, el sábado 14 se estableció la noche de los museos, así que después de cenar nos fuimos hasta el Caixa Forum.
En un ambiente recogido a las nueve de la tarde en la cafetería del CaixaForum comenzó el concierto de Arturo Jiménez, trío el cantador de flamenco Arturo Jiménez nos encandilo con su potente voz interpretando los temas de su último disco " Aromali", le acompañaba a la guitarra Pakito de la Serrana y el Maikel en las percusiones. Al terminar el concierto la noche se había echado encima, salimos a la terraza para admirar las luces encendidas de los cercanos edificios. La noche estaba fresquita, no molestaba la chaqueta.
A las diez y media visitamos la exposición Mamut, dedicada a esta especie ya desaparecida, fueron tres guías en tres lugares distintos las que nos informaron sobre la vida, el hábitat y la extinción de estos "lanudos elefantes". El espeso pelaje permitió vivir los mamuts en ambientes extremadamente fríos. Su extinción se produjo hace cuatro mil años, los últimos habitaron en el Ártico Siberiano.... el esqueleto completo es la pieza más espectacular de esta interesante exposición, llama la atención los largos colmillos de marfil, la parte más valiosa de ésta bello animal, aunque Carmen cierra los ojos seguramente temiendo que pueda tomar vida...
A las once y media nos metimos en la exposición Non Finito, en cada sala un guía explicando distintas obras inacabadas, el título "non finito" es sugerente, juega con nuestra imaginación, como sería la obra final. De las obras que hemos visto de Marcel Duchamps, de Francusi, de Sam Francis, del fotógrafo Andreas Gurrski... la que más me ha llamado la atención es el Apolo de Belvedere, realizado en yeso en 1889 por Domenico Brucciani.
Para mi la obra inacaba más importante son los llamados esclavos del genial Miguel Ángel, las figuras quieren liberarse del mármol, quieren liberarse de la prisión en que se encuentran. A partir del siglo XVI Miguel Ángel tuvo una gran influencia en la escultura, siendo innumerables las obras inacabadas"
Un poco antes de las doce dimos por terminada nuestra noche en el museo, con la alegría de ver como se recuperan las buenas costumbres de antes de la pandemia.
La jirafa
Tiene manchas amarillas como
arriates de narcisos,
plantados en altos ribazos donde
corren las víboras de los arroyos.
Hace avanzar sus patas gruesas
como troncos de palmera,
y sobre ella se yergue la excelsa
montaña del cuello coronada
por la luz del ojo
EMILIO GARCÍA GÓMEZ
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