El Buñuel no se cierra

El Centro Social Luis Buñuel, situado junto a Casa Amparo, en calle Predicadores pretender ser cerrado por el Ayuntamiento de Zaragoza, puntualizo por la colación que gobierna: VOX, PP y Ciudadanos.

Yo suelo asistir al mercadillo que en  el patio de se celebra el primer sábado de cada mes, mis compras más habituales son libros, también se puede ver ropa y utensilios de pequeño formato, en cuna ocasión Cecilio compro 200 postales... son numerosas las personas que se concentran para vender sus productos, en su mayoría de segunda mano, que sirve para ayudar en la economía de los residentes menos pudientes del barrio del Gancho.

Ante la amenaza de cierre se han convocado diversas manifestaciones y acciones de protesta por las asociaciones vecinales de la ciudad de Zaragoza. Con Carmen asistimos a la concentración celebrada el sábado 21 de enero que partía de la Plaza Santo Domingo, frente a la puerta de entrada del Buñuel. La pancarta colocada en la puerta del Teatro del Mercado dejaba claro el lema El Buñuel se queda

Más de cuatro mil  manifestantes nos dirigimos desde Plaza  Santo Domingo por calle Predicadores hasta el ayuntamiento en Plaza del Pilar. En el Buñuel se han realizado más de 500 actividades culturales, además se han repartido cerca de 30.000 comidas, existe la llamada "Olla solidaria" a la que acuden con las necesitados con su taper a recoger comida..

Debido a la proximidad del Buñuel con la Casa Amparo, los jueves cuando vamos con Juan a sacar a pasear a los residentes Francisco y Carmelo, nos acercamos animar a los jóvenes encerrados para resistir el desalojo que se prevé próximo, porque el señor alcalde dice "Es una promesa electoral el cerrar el Buñuel y hacer un centro para la tercera edad" y yo le digo que la promesa electoral no la va a cumplir porque faltan cuatro meses para las elecciones y no se presenta así que el centro de mayores no lo realizara y además si quería realizar un centro para la tercer edad en la calle San Pablo tiene el ayuntamiento media docena de locales que podía haber utilizado.

Mejor que yo Irene Vallejo, zaragozana premio nacional de ensayo por su libro el universo en un junco ha recogido en su articulo del País el sentir de una parte de los vecinos zaragozanos.

Estos días se vive en mi ciudad un agitado y complejo debate acerca del uso de un edificio histórico, el Centro Social y Cultural Luis Buñuel... Este es el conflicto que se vive ahora mismo en el barrio del Gancho de Zaragoza, y supongo que esa batalla por la ciudad tiene muchos escenarios simultáneos. Parece inminente el desalojo del Centro Luis Buñuel, donde todos los sábados se organiza una olla solidaria que reparte raciones de comida para 200 familias, donde se afrontan problemas comunes como la precariedad laboral y la vivienda, donde se ha organizado una biblioteca, teatro, gimnasia para mayores o baile en línea y redes de apoyo... diría que cualquier transformación debería contar con las estructuras creadas por la gente del barrio, y no desmantelarlas. La ciudad es de todos. Las ciudades tienen la capacidad de proporcionar algo para todo el mundo, solo porque, y solo cuando, se crean para todo el mundo»