Palacio de la Aljaferia, crítica a la autenticidad.

La semana pasado realice un visita guiada por Gonzalo Borras la Aljaferia. Todo lo que hoy escribo son sus comentarios, porque cuando Don Gonzalo habla yo me callo.

Empezó la visita en el lado oeste. Don Gonzalo empezó haciendo unas consideraciones: la Aljaferia es un palacio esquizófrenico, que tiene dos tratamientos, la mitad oriental ha sido restaurado y la otra mitad rehabilitado, rehabilitar es usar el edificio para otros usos, la rehabilitación del palacio fue realizada por el arquitecto Don Francisco Iñiguez, la palabra que técnica define la restauración es anastilosis...en primer plano tenemos el foso, realizado en 1593, reinando Felipe II, quería transformar el palacio en fortaleza, en el siglo XVIII, época de Carlos III se produjeron intervenciones para adaptarlo a un reciento militar. Los torreones neogóticos, de 1870, reinado de Isabel II, que fue la última adaptación a cuartel.

Continuamos por el lado sur, observamos una brutalidad, se une con cemento la pared de ladrillo con la muralla que estaba restaurando don Francisco Iñiquez y que no pudo terminar porque falleció en 1982... Llegamos al lado este, donde se encuentra la entrada al Palacio Hubi. Lo primero que observamos, mirando desde la base de la muralla, es que hay unas hiladas de piedra en alabastro, esto es original, igual que los torreones, y siguen en ladrillo, esto es restauración, en la puerta al palacio observamos una galería de arcos, no es original, es  nuevo, invención del arquitecto Iñiguez, lo saca de una postal de 1770 que había realizado un famoso viajero. En la puerta las partes blancas son de alabastro, original, el resto de ladrillo.

Pasamos al interior y en la torre del Homenaje, o torre del Trovador, o torre de los vientos, bajamos hasta el subsuelo, justo al lado del pozo que sirve de aljive nos encontramos con los restos de un palacio de época califal, datado en el siglo XI, anterior al palacio Hubi, este primer palacio tiene influencia Omeya y destacan los arcos de Herradura de época califal.

Pasamos hacia el lado sur, con pórtico y acceso a las habitaciones, se aprecian los arcos polilobulares y mistileneos, en el patio se celebraban las fiestas de coronación de los Reyes de Aragón, es decir se celebraban los banquetes y bailes y se bajaba en procesión hasta la catedral de La Seo para ser coronados por el Arzobispo. Se aprecian los arcos vaciados, los originales se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional, donados en tiempos de Isabel II cuando transformo el palacio en cuartel y amplio el patio, para esto derribo la capilla de San Jorge y hoy tenemos un pequeño altar conmemorativo. En frente del patio tenemos el palacio Hubi, donde se encuentra el palacio del sultán, la mezquita, de estilo califal cordobés...el centro del patio conserva restos de arcos mudéjares, Francisco Iñiquez derribó el palacio medieval de Pedro IV, que se encontraba en medio, como un bocadillo entre el palacio musulmán y el de los Reyes Católicos, de época modernista, es lo que tiene las restauraciones, que para recuperar un periodo hay que destruir otro.

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