Selva Negra y Baviera

Siguiendo nuestro viaje por Alemania el martes, 4 de septiembre llegamos a la Selva Negra, la primera localidad  la que paramos es Triberg, famosa la fabricación de los relojes de cuco, en sus calles se exponen trajes tradicionales de ésta zona, desde aquí realizamos una marcha de dos horas por un bosque siguiendo el curso del rio Gutach. Seguidamente salimos para Gegenbach,  donde almorzamos, sus calles pintorescas calles han servido como escenario de varias películas, la más famosa "Charlie y la fábrica de chocolate"; es un pueblo de postal. Friburgo, capital de la Selva Negra, aquí visitamos la catedral, el ayuntamiento   paseamos por el casco viejo, después a cenar y dormir. 

El día 5 recorrimos el lago Tisisee, de origen glaciar en la cordillera Fedberg se sitúa en el corazón de un bosque, el lago estaba cubierto de barcos y patines de pedales, posteriormente llegamos a Meersburgs antigua residencia de los príncipes obispos situada a orillas del Lago Constanza, destaca por su castillo medieval y sus calles empedradas, desde la terraza del castillo nuevo divisan las altas cumbres de los Alpes suizos; después de almorzar cogimos un ferris para surcar l as tranquilas aguas el Lago Constanza hasta llegar a la ciudad del mismo nombre, en la entrada del puerto una majestuosa estatua, la guía comenta que de una prostituta... La ciudad de Constanza es famosa por los concilios que realizo la iglesia católica en la Edad Media. En la actualidad la ciudad tiene la particularidad de que la mitad se sitúa la frontera con Suiza.

A la mañana siguiente, dejamos el Lago y nos dirigimos a la región de Baviera. Nuestra primera parada fue en Neuschwanstein, donde se encuentra el Castillo de Rey Loco, Luis II de Baviera, un rey romántico, que tuvo relaciones con la emperatriz Sisi y muerto en extrañas circunstancias, apareció ahogado en un lago próximo al castillo... Mientras esperábamos para entrar empezó a llover fuertemente, de hecho el agua ya no nos dejó en todo el viaje. El castillo sirvió de inspiración para Walt Disney para crear el de la Bella Durmiente, los pudimos ver en Euro Disney, en Paris. El interior del castillo no me pareció tan interesante como el exterior.

El sexto día llegamos a Múnich, capital de Baviera, en el bus realizamos una vista panorámica, recorrimos las calles del centro histórico y pasamos por el Parque Olímpico, el Palacio de Nymphenburg, la Plaza del Rey, el Ayuntamiento...la  Residenz, antiguo palacio Real de príncipes y reyes de Baviera, en el interior me gustaron las salas del Antiquarium, en la que se encuentra un espléndida colección de esculturas de emperadores de época romana, la sala de los Antepasados, con las paredes cubiertas de retratos de príncipes. La sala de Porcelana orientas, con una magnifica colección de objetos. la galería verde, con una colección de pinturas de Caravaggio, Rubens, Ribera y otros maestros y la capilla de la Corte, en total pase tres horas disfrutando del arte.

El segundo día en Múnich seguía lloviendo, por la mañana nos llegamos hasta la plaza del Ayuntamiento, después de contemplar la bonita fachada tomamos una degustación de cerveza y bretzel, típico de la región, Munich además de por la gran cantidad de museos, monumentos y palacios destaca por las cervecerías, en una de ellas que (HB) cabían hasta 4.500 personas,  Después fuimos a comer el famoso "codillo alemán". Por la tarde como seguía lloviendo nos refugiamos visitando iglesias: La de San Cayetano, la de san Michel, cuya cripta sirve de cementerio para los reyes bávaros, entre otras tumbas destaca la de Luis II, el rey loco y por fin la catedral, con poca cosa en su interior, destacan más sus torres que terminan en forma de cebolla.
El tercer último día fuimos paseando por la orilla del río Isar hasta llegar a una pequeña isla en la que se encuentra el Deutsches Museum, el Museo Alemán de la técnica, me gustaron las secciones de navegación con barcos de todo el mundo: vapores, veleros, remolcadores... y también la torre del museo, a la que ascendimos por ascensor, me llamaron la atención los satélites meteorológicos, en total que tuvimos que marchar sin terminar de ver el museo porque había que ir a coger el avión.
 Dicen que los viajes son importante si aportan algo en tu vida... en esta ocasión fueron las vivencias con otras personas del grupo, cuarenta de distintas partes de España que estuvimos compartiendo bus y alojamientos, especial trato tuvimos con la familia burgalesa de Primitivo, intentamos visitar el primer monasterio Benedicto en la isla de Reicheneau, pero llegamos tarde. Esperamos encontrarles en otro viaje para incrementar nuestra amistad.