El Greco en Zaragoza

En Zaragoza en el Museo Camón Aznar hasta el 29 de mayo tenemos la exposición El Greco, los pasos de un genio.

La exposición me parece fantástica, imprescindible de ver para los amantes de la pintura. Entre las obras que me han llamado la atención destaca el niño soplando un tizón, esta pintura es una recreación de una obra perdida de la antigüedad, del pintor Antifilo. El resplandor del fuego ilumina figura del niño. Esta obra esta emparentada con el tenebrismo de Caravaggio o las pinturas negras de Goya.

Es la segunda vez que veo las obras del Greco en Zaragoza, la primera fue en 2008 en la Exposición Internacional, en aquella ocasión el lugar elegido fue el Edificio Paraninfo. La segunda obra que me gustaría comentar es la Oración en el Huerto. Se aprecian las dos escenas representadas dentro del cuadro: la terrenal, en primer plano, los apóstoles dormidos, las voluminosas figuras están apoyadas en rocas. En un plano superior Jesús de arrodillado sobre una túnica y esta orando con un ángel que esta flotando sobre una nube, están en el cielo, en la parte más elevada se aprecia la luz celestial. El cuadro visto desde arriba nos ofrece el recurso característico de la pintura manierista: la doble perspectiva y la inclusión de figuras cortadas, algo impensable durante el Renacimiento.

Recientemente he terminado de leer una biografía sobre El Greco de Francisco Calvo Serraller, en ésta afirma que "El Greco era considerado como un personaje extravagante por sus contemporáneos y tachado más tarde lunático pro aquellos pocos que recordaban su existencia". La pintura la expulsión de los mercaderes del templo es uno de los causantes de la opinión que sobre él escribieron sus "colegas" pintores: la ostentosa verticalidad articulada sobre el eje de Cristo, el ondulante cimbreamiento de las figuras, de abajo arriba, como llamas serpenteantes, la belleza del cuerpo humano reside en la anatomía y el movimiento. 

 Entre noviembre de 2015 y febrero de 2016 el Caixa Forum realizo en Zaragoza una exposición bajo el titulo: El Greco. La mirada de Rusiñol", fueron pintores y escritores como Rusiñol quienes revalorizaron al Greco, a finales del siglo XIX, revindicando la "fuerza expresiva de sus obras". 

En la exposición encontré obras de Goya, Murillo, Ribera, Picasso, precisamente fueron los cubistas los que revindicaron el nombre del Greco para la pintura y dos de Diego Velázquez: La imposición de la casulla a San Idelfonso y el retrato de San Simón de Rojas difunto. Maravillosa obra para terminar la exposición.

Con la nómina de pintores que acompañan al Greco me parece que es una de las mejores exposiciones de pintura vistas en Zaragoza y ánimo a todos mis amigos a visitarla, no se la pueden perder, además y como aliciente el segundo domingo de cada mes la entrada es gratuita al museo. Espero que disfrutéis tanto como yo y ¡Ya me contareis vuestra impresión!