viernes, 30 de octubre de 2020

 Visita al Palacio de Liria en Madrid

El pasado día 18, mientras Vicky estaba realizando el examen de oposición, nos acercamos con Carmen, al Palacio de Liria en Madrid.


Situado cerca de la Plaza de España, el Palacio de Liria es la Casa de los Duques de Alba, la familia "mas grande" de España, en lo que se refiere a títulos nobiliarios. A las diez y media dio comienzo la visita, un grupo de seis personas con audio y guía y previa compra de tikets por internet.
 Los espectaculares jardines dejan ver la fachada de la Casa Palacio de cinco pisos.
Ante la prohibición de realizar fotografías en el interior, las siguientes fotografías las he "cogido prestadas del google"



En la planta baja, para entrar en ambiente al viaje que vamos a realizar encontramos una berlina de gala de fabricación Ehler, realizada en madera noble, con magníficos cristales y escudos dorados, que recuerdan los cuentos de hadas, desde aquí se  accede a la escalera que sube hasta el primer piso; tapices, cuadros, jarrones y estatuas clásicas, la más valiosa una afrodita sin cabeza del siglo III Antes de Cristo, de época clásica griega... El palacio se construyo en el siglo XVIII y en él se guardan las principales obras artísticas de la familia de los duques de Alba. La casa palacio, la más grande de Madrid rivaliza con el Palacio Real. 


La nomina de pintores que cuelgan sus cuadros en la paredes de los distintos salones es extensa y de máxima calidad: Rubens, Teniers, Ticiano, Velázquez, El Greco, Zurbaran, Ribera, Pantoja de la Cruz... Se ve que los propietarios de la Casa tenían buen gusto y mucho dinero. Si me dejaran llevarme un cuadro yo me inclinaría por el realizado por Francisco de Goya a la Duquesa de Alba, ¡espectacular! Goya al igual que Zuloaga tienen una sala dedicada para sus pinturas. Goya fue el pintor preferido por los Duques de Alba, recuerdo las famosas majas: la vestida y la desnuda, para que una duquesa posara desnuda tenía que tener una relación especial con el pintor.


Del resto de salones: cocina, comedor, de retratos, total una docena, yo me quedo con el salón de baile, me gustaría haber podido mirar los bailes en que participaba la alta sociedad madrileña: terratenientes, marqueses, duques, banqueros y sobre todo las señoras con sus lujosos vestidos y atrevidos escotes que lucían las joyas que de sus colgaban de sus cuellos: piedras preciosas, rubíes, esmeraldas y bailando los vals de Strauss bajo la luz de la lámpara araña... El ambiente del palacio me ha hecho fantasear.
Para terminar la visita de la casa palacio hemos estado en la biblioteca, mirando ejemplares únicos: una biblia de 1430, el testamento de 1516 de Fernando el Católico, la relación de puño y letra de Cristóbal Colón de la nomina de marineros que le acompañaban en su viaje a América. Documentos históricos de incalculable valor.

Quieres darle la vuelta al reloj

para que un viento distinto

disuelva el tiempo

y aleje la ceniza

de las horas tristes.

 Quedan como siempre las preguntas

¿Cuándo se convirtió en maleza

el jardín? ¿Quién hizo crecer

ese ahogo de hierbas salvajes? 

En esta tarde de sol

con temblores de verano

andas por tu infancia

como si fuese un lugar extraño

en el que nunca hubieras vivido,

una casa abandonada y en ruinas

colgada de las tinieblas

de un monte muy lejano.


ANA MARIA NAVALES




No hay comentarios:

Publicar un comentario